Agitación y sudor, comienzo a sentir temor
Escalofrió constante y mi cerebro pensante
Mi corazón es una máquina de latidos que van acelerando los sonidos
Portales inter dimensionales, con sonidos demenciales,
En aquella esquina de ese cuarto los aullidos estremecen mis quejidos
El humo empieza a tomar forma mientras mi pecho se deforma
Y aquellos perros de Tindalos, con sus enormes lenguas azules,
Una viscosa y al parecer pegajosa saliva, arrasa con todo de abajo hasta arriba
Como sufría, mientras esta espectral criatura me destruía, succionaba mi alma y se comía mi carne, no existe cosa en la tierra que nos salve, cuando estas espectrales bestias tienen hambre.
Parte del cuerpo y decapitada tu cabeza quedara cuando las inter dimensionales criaturas logren pasar y a sus presas pueden tomar, para poderse alimentar,
Ni tu alma o tu carne se podrán salvar si un perro de tindalos te ha de asechar
Solo la tortura y el pánico se quedaran en tu sangriento y doloroso final, cuando los perros de tindalos se disponen a alimentar los espectrales cuerpos que te han de asechar y al otro lado te harán pasar.
Escrito por: Arles Fernando Zambrano Perez
- Se encuentra en el Libro Insomnio editorial ITA
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